lunes, 26 de diciembre de 2011

Operación asfalto

En este reencuentro con el ejercicio, y después de tanto tiempo sin una rutina ni un entreno fijo, es hora de retomar viejos hábitos, hora de reencontrarse con nuestro "amigo" el asfalto, aquel que vio como daba aquellos primeros pasos hace años cuando empezaba a correr por primera vez, aquel que fue testigo de como comenzaba de nuevo a correr despues de haberme partido el peroné y los ligamentos del tobillo (deltoido, calcaneo y astrágalo) y que vio poco a poco como volvía a correr, cuando tras la operación había bastantes posibilidades de no volver a hacerlo nunca más,...

Huyendo un poco del frio, llegamos al lugar elegido, la Av. Anaga y como si de un ritual mágico se tratase comienzo a desprenderme del chandal, a atarme las ligas de las zapatillas, colocarme el correspondiente GPS para no perder detalle del pésimo estado de forma en el que estoy aun (todo irá mejorando) y como no y no podía ser de otra forma me coloco mi Ipod y busco entre las listas memorizadas alguna que me motive para soportar los 45min que quedan por delante, objetivo 10km, lista encnotrada, le toca el turno hoy a Isabel Mebarak Ripoll (gracias por acompañarme durante estos 45 min Isabel, sin ti hubieran sido mucho mas duros), todo listo para comenzar.

El inicio es esperanzador, las piernas ,un poco cargadas de ayer, responden bastante bien, los pulmones paracen funcionar, el corazón aguanta sin aumentar demasiado su ritmo e Isabel comienza motivando un pequeña balada de fondo, como si hasta supiese que aun estamos calentando y que no puede todavia aumentar mucho el ritmo de su música. Poco a poco voy entrando en calor, las piernas se van soltando y hasta la música va cogiendo cada vez mas ritmo, comienzan ahora los primeros adelantamientos ya que por la hora y por la zona elegida hay una variedad de gente bastante amplia, adelanto corredores, esquivo ciclistas y pationadores, atravieso parejas que pasean por la avenida y hasta tengo que hacer malabares para no llevarme por delante a  alguna persona mayor que se adentra en la zona sin mirar y sin percatarse siquiera de la presencia del resto de gente. Solo una cosa me llama la atención, y es ver como todo el mundo que pasea lo hace con una bolsa, un paquete, un regalo o cualquier otra cosa que ha adquierido recientemente, la vorágine del consumismo se ha adueñado de nosotros y nos hemos dado cuenta, la crisis aunque sea por el día de hoy, ha desaparecido, un sin sentido de consumir por consumir se ha apoderado de la gente y la única medicina que lo curará, como suele ocurrir con la mayoría de las cosas, es el tiempo, el 6 de Enero la enfermedad pasará.

Pasan los minutos y los kilómetros van aumentando, el GPS cada vez marca mas km y de repente como si de una estampida de una sola persona se tratase pasa al lado mio el número 8, no me pregunten como era, si alto o bajo, rubio o moreno, grueso o delgado,...solo sé que llevaba una camiseta con el número 8 a la espalda y que me paso como si fuera una brizna de viento, como si fuera una gazela que huye de las garras de un león, esta era mi oportunidad de medir mis fuerzas y mi estado de forma, no podía dejarla escapar. Aumenté el ritmo hasta ponerme a su estela, en ningún momento pense en adelantarlo, tan solo en seguir su estela y ver cuanto tiempo era capaz de seguir su ritmo. Las pulsaciones aumentan, la respiración se hace cada vez menos profundo y mas rápida y las piernas se mueven con mayor velocidad y de pronto cuando ya iba a un ritmo considerablemente alto (para mi estado actual) se me viene, no sé porque ni cual fue la causa pero allí aparecio, un consejo que me dieron hace mucho tiempo "no aumentes el ritmo, aumenta la zancada" y efectivamente, funionó, aumenté la zancada y al instante siguiente ya mi ritmo habia disminuido, mis pulsaciones estaban bajando y mi respiración se tomaba un descanso, pude entonces continuar tras la estela hasta el final de la Avenida. Al llegar al final, ya estaba listo, aunque mas por cabezoneria que por ganas, para dar media vuelta y comenzar el tras el número 8 el recorrido en sentido inverso, pero para mi sorpresa, paró!! y vamos que si se lo agradezco, porque para ser el primer día, con esos 1500m a todo ritmo ya había tenido suficiente.

El resto de kilómetros continue a un ritmo no muy elevado, solamente para que mis piernas se acostumbren de nuevo al continuo golpeteo contra el suelo, para que mi corazón funcione de una manera diferente al que lo hace cuando monto en la bici, podriamos decir que fué un mero trámite de aclimatazión.

Gracias Isabel Mebarak Ripoll por animarme durante 45 minutos..objetivo cumplido!!!

3 comentarios:

  1. Ánimo con los entrenamientos y la vuelta a la rutina. Dentro de un mes verás como te encuentras mucho mejor.

    Por cierto, te seguiré tu blog. Se hace anema la lectura. Sigue así.

    Por cierto, qué GPS tienes?

    ResponderEliminar
  2. Gracias, intentaré mantener una continuidad, me alegro q t gusté.

    GPS?no podía ser otro, GPS Kalenji 700, expectacular, no tiene otra definición, kien nos iba a decir n nuestros primeros viajes a Francia q llegariamos a este nivel.

    ResponderEliminar
  3. Aún lo pueden mejorar más, jejeje. No has probado el Forerunner 610... Poco a poco.

    Me gusta el Kalenji, pero le encuentro un par de fallos.

    Saludos y feliz año!!!

    ResponderEliminar